El máximo dirigente del ultraderechista partido Fidesz consideró que era necesario frenar a quienes abogan por mantener la confrontación en Ucrania, donde el presidente Vladimir Putin ordenó una operación bélica el 24 de febrero de 2022 para proteger a la región rebelde del Donbás.
En caso del éxito en los comicios del Parlamento Europeo de fuerzas a favor de la paz, éstas desacelerarían las decisiones bélicas en Europa e, incluso, las anularían, comentó el jefe de Gobierno, después que la Unión Europea propuso 50 mil millones de euros para el rearme ucraniano.
Además, los estadounidenses también irán a las urnas en noviembre próximo y en ese caso Orban consideró al candidato republicano Donald Trump como supuesto partidario de la paz, algo que observadores aquí ponen en duda, dado el militarismo practicado por la Casa Blanca.
Pero por el momento, en Bruselas y Washington dominan las posiciones de respaldo a las acciones combativas en Ucrania, mientras que los líderes políticos se comportan como si se trata de juegos de azares, comentó el dirigente magiar en su cuenta de Facebook.
En lugar de dejar claro en Bruselas que no se trataba de nuestra guerra o de aislar ese conflicto, son cada vez más los estados que suministran una mayor cantidad de armamentos y dinero, opinó Orban al referirse al rearme de Kiev.
Al respecto, recordó que el pasado sábado los estadounidenses decidieron dedicar casi 61 mil millones de dólares para Ucrania. Nosotros los europeos ya destinamos 100 mil millones de euros con ese propósito, declaró.
Bruselas se comporta como si perdiera en un juego de cartas, pues en todo momento sube las apuestas porque desea recuperar lo perdido. Eso puede llevarnos a una guerra en toda Europa, comentó el primer ministro.
Moscú en todo momento advierte que la ayuda bélica a Kiev solo puede extender la confrontación, en medio del suministro por Occidente de modernos tanques, vehículos blindados, obuses, sistemas antiaéreos, misiles de mediano alcance y cazas de países de Europa del Este.
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