Una importante línea de nuestro trabajo es eliminar discriminaciones por motivos de género en entidades científicas y de servicios nacionales y locales, aseguró la directora de Consas, Yanaisy Sáez Sarría.
Frenar la segregación profesional, promover la armonía trabajo-familia, más otros aspectos, es fundamental, comentó Sáez Sarría a Prensa Latina al término de la validación de la estrategia de género en el Instituto de Investigaciones Porcinas (IIP).
Según opinó, en las instituciones trabajan mujeres con gran nivel educacional y científico, pero es necesario más trabajo para concientizar acerca del tema porque hay rasgos de nuestra cultura muy arraigado en el contexto rural.
En Cuba avanzamos mucho en ese sentido, aunque debe insistirse en que la mujer tenga el rol capaz de ganarse con sus esfuerzos y aptitudes, para evitarles enfrentamientos a desventajas, alegó la investigadora.
Y agregó que «en las instituciones agropecuarias la labor de concienciación debe ser más intensa, porque tienen mucha presencia masculina».
Urge eliminar las brechas entre mujeres y hombres y para ello debemos dotarlas de conocimientos y habilidades, además de garantizarles acceso a las tecnologías, insistió.
Hay ejemplos donde aplicamos el proyecto de incremento de productividad y aumento del sentido de pertenencia, a partir de crear para las mujeres el mismo acceso a tareas, insumos y procesos, afirmó.
Falta mucho por lograr, aseveró, y consideró que «hay estereotipos enraizados, sobre los cuales alertamos».
Seguiremos trabajando, subrayó, porque empoderar a la mujer favorece la economía, estabilidad y justeza social, además de resultar un derecho humano, y ayuda a lograr los objetivos de desarrollo sostenible.
Este martes, apuntó, «hicimos la primera validación del país, pero extenderemos esa experiencia a otros lugares, con apoyo de diferentes entidades docentes, de investigación y productivas».
Consas, del programa Apoyo Estratégico a la Seguridad Alimentaria Sostenible (SAS-CUBA), es desarrollado por el Ministerio de Agricultura en los municipios Santa Clara, Remedios y Placetas, en Villa Clara, y Sancti Spíritus, Taguasco y Yaguajay, en la también central provincia de Sancti Spíritus.
El proyecto tiene financiamiento y apoyo técnico de la Unión Europea, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Fundado en 1972 y considerado rector de la ciencia y técnica de la cría de cerdos, el IIP desarrolla estudios, proyectos y programas enfocados a responder a exigencias de la porcicultura.
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