En sus palabras, previas a su visita al gigante asiático, el líder ruso subrayó que la interacción entre ambos países no depende de la ideología ni de la coyuntura política.
«Durante tres cuartos de siglo nuestros países han recorrido un camino largo y a veces difícil. Hemos tenido plenamente en cuenta la experiencia histórica de nuestras relaciones. Hoy constatamos el poderoso impulso que supone para un rápido desarrollo integral la combinación de ventajas complementarias», subrayó Putin. En este sentido, estimó que es importante que los modernos lazos ruso-chinos sean independientes de la ideología y la coyuntura política.
Su desarrollo multifacético es una elección estratégica consciente basada en la amplia coincidencia de los intereses nacionales fundamentales, la profunda confianza mutua, el fuerte apoyo público y la sincera amistad de los pueblos de los dos países, explicó.
Además, especificó que se trata de «esfuerzos conjuntos para fortalecer la soberanía, proteger la integridad territorial y la seguridad, y en un sentido más amplio, para la promoción del desarrollo y la prosperidad de Rusia y China mediante el aumento de la cooperación equitativa y mutuamente beneficiosa.
Esa interrelación se da en las esferas económica y humanitaria, sobre el fortalecimiento de la coordinación de la política exterior en aras de la construcción de un orden mundial multipolar justo. «Todo esto predetermina el futuro exitoso de nuestra asociación integral y estratégica en la nueva era», agregó Putin.
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