Según ese parámetro que mide la capacidad relativa que tiene el país para cumplir sus compromisos financieros, la mejora en la calificación de crédito del Gobierno de Nicaragua refleja la implementación de políticas económicas prudentes.
El informe, citado por el Banco Central de Nicaragua (BCN), agregó que tales políticas respaldan los excedentes tanto en la parte fiscal como en la cuenta corriente externa, y la acumulación de colchones financieros, lo cual sitúa a esta nación centroamericana en una mejor posición para manejar consecuencias económicas adversas. “Un amplio superávit en la cuenta corriente externa permitió una acumulación de reservas internacionales significativa; mientras que el superávit fiscal está impulsando la reducción de la deuda del Gobierno como porcentaje del Producto Interno Bruto, lo que pone al país en una mejor condición para enfrentar los retos externos”, subrayó.
Destacó el crecimiento económico de Nicaragua, le cual se aceleró en 2023, consolidando su recuperación tras los problemas de años anteriores.
En ese sentido, la información precisó que el consumo privado fue el principal motor del crecimiento, impulsado por la expansión del crédito y un aumento significativo de las remesas.
Además, la inversión pública se moderó a partir de niveles elevados, mientras que la privada experimentó un fuerte crecimiento.
De acuerdo con el BCN, esta acción de calificación se produce en el marco de la revisión anual de la apreciación soberana que Fitch Ratings otorga a Nicaragua.
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