Los aliados y amigos de Rusia en la CEI entienden perfectamente que esa conferencia no tiene nada que ver con la paz, pues su verdadero objetivo es formar una coalición antirrusa, presentar un ultimátum a Moscú y crear la apariencia de un apoyo internacional a la fórmula de Zelenski, precisa el comentario.
En opinión del rotativo, semejantes conferencias no aportan nada al arreglo político, su celebración no tiene sentido y está condenada al fracaso. Aparte de todo, Rusia no pensaba participar en ese evento.
Suiza, a solicitud del gobierno de Kiev, celebrará los días 15 y 16 de junio una conferencia de paz sobre Ucrania en Burgenstock, cerca de la ciudad de Lucerna.
El pasado 9 de abril, el vocero de la embajada rusa en Berna, Vladimir Jojlov, comunicó que, Rusia no asistirá, pues la cumbre es otra opción para impulsar una fórmula de paz ucraniana inviable que no tiene en cuenta los intereses rusos.
También la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores María Zajárova declaró el 11 de abril que Moscú no participará en el evento, ya que solo representa una plataforma para promover la llamada fórmula de paz de Zelenski.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores suizo, Ignazio Cassis, remarcó que ningún proceso de paz puede llevarse a cabo sin Rusia.
Al respecto, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, advirtió que la posible presentación de un ultimátum colectivo a su país en la conferencia en Suiza sobre Ucrania, anula cualquier posibilidad de que ese evento resulte exitoso.
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