Esto la aleja de su posición tradicional, basada en la neutralidad desde hace mucho tiempo, dijo Peskov, comentando el llamado de la Unión Democrática de Centro (UDC), mayor partido parlamentario suizo, a invitar a Rusia a la citada conferencia y no convertirla en una mera propaganda armamentística.
El vocero señaló que, en la cuestión de Ucrania, Berna ha perdido considerablemente su neutralidad tras «solidarizarse con la minoría occidental».
Por lo tanto, continuó, Moscú comparte la visión del partido UDC, que se pronunció a favor de la participación de Rusia, pero lo considera un asunto de Suiza.
La UDC tiene 62 de los 200 escaños en el Consejo Nacional (Cámara Baja del Parlamento) y se pronuncia en contra del ingreso de Suiza en la UE y la OTAN, optando por mantener la estricta neutralidad del país, y se opone a las sanciones antirrusas y los suministros de armas para Ucrania.
Suiza celebrará los días 15 y 16 de junio una conferencia de paz sobre Ucrania en Burgenstock, cerca de la ciudad de Lucerna. Rusia faltará a este foro, al que fueron invitados unos 160 Estados.
El embajador en Berna, Serguéi Garmonin, dijo anteriormente que Rusia no participará en ningún formato, alegando que la conferencia busca presentar un ultimátum a Moscú y no pasará de ser una ruidosa acción publicitaria.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, a su vez, señaló que el proceso negociador sobre Ucrania no tiene sentido sin la participación de Rusia.
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