A través de la cuenta de la Presidencia en X, antes Twitter, el mandatario trasmitió su solidaridad a los afectados por la tragedia y encargó a las autoridades competentes que tomen las medidas necesarias para ayudarlos.
Tshisekedi igualmente indicó que se investiguen las verdaderas causas del “desgraciado incidente”, con el fin de evitar que una catástrofe semejante se repita en el futuro.
El naufragio ocurrió la noche del lunes 11 de junio en el río Kwa, a 70 kilómetros de la ciudad de Mushie, en la provincia de Maï-Ndombe, cuando el navío La Sainteté, que se dirigía a Kinshasa, se averió tras fallarle el motor, con un balance provisional de más de 80 muertos.
Un centenar de personas fueron rescatadas, según reportó Radio Okapi.
El comisario del río Mushi, Ren Maker, refirió que la embarcación transportaba más de 270 pasajeros y mercancías, de los cuales un total de 185 pasajeros escaparon con vida.
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