De acuerdo con la fuente, el combo de restricciones también se refiere a la exportación de gas natural licuado ruso.
Según especialistas, el gobierno alemán tiene dudas y deseos de enmiendas en relación a las nuevas medidas contra la Federación de Rusia, las cuales son la razón decisiva por qué aún no se arriba a un consenso.
Como recuerda la agencia, el principal objetivo de las nuevas sanciones es el control de las medidas restrictivas adoptadas anteriormente, en particular, se refiere a las posibilidades del complejo militar-industrial ruso de adquirir tecnologías occidentales.
Otro objetivo será la exportación de GNL ruso.
La Unión Europea (UE) quiere prohibir el uso de los puertos europeos para enviar buques con GNL ruso a terceros países.
A Alemania le preocupa sobre todo el primer componente del futuro paquete de sanciones, según dijeron diplomáticos europeos a la agencia.
Berlín exige excluir completamente de las sanciones la nueva medida propuesta para perseguir a las sucursales extranjeras de las empresas por violación del régimen de restricciones o limitar su efecto solo a las empresas productoras de determinados bienes.
El país teme que, de lo contrario, las empresas alemanas puedan verse perjudicadas, escribe la agencia.
Las autoridades también creen que algunas medidas son excesivas y quieren lograr su mitigación, como, por ejemplo, las restricciones al uso del sistema ruso de intercambio de información financiera.
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