Un análisis divulgado este miércoles en el sitio digital del diario La Stampa, el cual cita fuentes legislativas, destaca que pese a las fuertes protestas de partidos opositores de izquierda, se aprobó en ese foro la normativa que concede atribuciones a las regiones, que en un primer momento tendrán un carácter temporal.
También se destacó la votación favorable, por 109 contra 77, sobre la elección directa de los futuros primeros ministros, una iniciativa que ahora es analizada en la Cámara de Diputados, la cual debe pronunciarse en los próximos días al respecto.
Aunque la primera ministra, Giorgia Meloni, se apuró en celebrar esa victoria que consideró, en un mensaje divulgado en las redes sociales, como “un primer paso adelante para reforzar la democracia”, se trata apenas del comienzo de un largo proceso legislativo, debido a lo complejo que resulta reformar la Constitución.
El proyecto de ley debe ser votado dos veces tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, con una distancia en el tiempo de al menos tres meses, y si no es aprobado por dos tercios de los parlamentarios o si lo solicita un quinto de los miembros de una de las Cámaras tendrá que ser confirmado con un referendo, algo muy probable.
Durante una masiva manifestación de fuerzas opositoras realizada en la Plaza de los Apóstoles, la secretaria del Partido Demócrata (PD), Elly Schlein, manifestó que esta reforma “está dividiendo a Italia”.
La denominada autonomía diferenciada, con la mayor concesión de atribuciones a las regiones, aumentará las desigualdades y por ello “es importante estar aquí como fuerzas de oposición, realidades políticas y sociales, ciudadanos unidos para evitar que nuestra Constitución sea revocada”.
Por su parte, el líder del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), Giuseppe Conte, afirmó que “nuestra reacción contra la autonomía diferenciada, contra la división de Italia, es fuerte y unida”, e igual sucede con el proyecto para instaurar la figura de un primer ministro
Esa iniciativa, conocida como “premierato”, establece la elección del jefe de Gobierno en los comicios e introduce el máximo de dos legislaturas de cinco años en el cargo.
De acuerdo con lo previsto en la actual Constitución de la República, los italianos votan por los partidos políticos o sus coaliciones y son estos los que, de acuerdo con sus resultados, apoyan ante el jefe de Estado, a un candidato a presidente del Consejo de ministros.
mem/ort
