La primera parada de Biden al llegar a Michigan fue en Northville donde saludó a un entusiasta grupo de votantes y luego siguió hasta Detroit Renaissance High School, donde prometió que volverá a ganar el estado en 2024 y centró sus ataques en su antecesor republicano, el exmandatario Donald Trump.
Dijo que los medios de prensa aquí lo han golpeado desde su debate del 27 de junio en Atlanta.
Durante el discurso ocurrió algo de lo que ya es habitual en cualquier lugar al que llega: fue interrumpido por un manifestante que gritó “Palestina libre, libre». La persona fue sacada del auditorio.
Al retomar el hilo de sus palabras, Biden solo expresó que «esta guerra debe terminar»(la de Israel contra Hamas en Gaza).
El presidente repitió que continuará adelante en su campaña y como los votantes decidieron, “nadie más (…) yo no voy a ir a ninguna parte», porque además se considera el único que ha vencido a Trump “y voy a volver a vencerlo». Los presentes corearon: «¡No renuncies!».
Este viernes Biden también se reunió virtualmente con BOLD PAC, el brazo político del Caucus Hispano del Congreso, en un intento por redoblar los esfuerzos para revertir el deterioro del apoyo de legisladores del partido.
El representante Mike Levin, miembro del grupo, pidió en la reunión al presidente que se hiciera a un lado en la campaña.
Hasta ahora, 17 demócratas del Congreso exhortaron públicamente que el presidente abandone la candidatura.
Aunque después de la participación de Biden en el debate, las encuestas revelan que la carrera presidencial no ha cambiado y que sigue empatada estadísticamente, de acuerdo con un nuevo sondeo nacional de NPR/PBS NewsHour/Marist.
El tanteo determinó que ganó un punto desde el estudio de opinión del mes pasado, que se realizó antes del debate. En esta encuesta, Biden, con 50 por ciento, aventaja a Trump, que obtuvo el 48, en un eventual enfrentamiento.
Pero al responder otra pregunta, casi seis de cada 10 entrevistados creen que Trump ganará.
arc/dfm
